Desde mi ignorancia hasta tu descubrimiento

¿Por qué? Mis labios buscan a los tuyos, como si supieran lo que desencadenarían sin, ni siquiera, haber tocado los tuyos.

¿Por qué? Mis manos buscan el tacto de las tuyas, sintiendo erizar mi piel al contacto de la tuya, si nunca, he logrado tener contacto mi piel y la tuya.

¿Por qué? Mi mente cuando es llamada al reino de Morfeo y sin facultad de razón te busca en mi sueños desesperadamente.

Sea lo que sea, espero que tú lo sepas porque ni siquiera sé, porque lo siento yo.

 Pensamientos Recientes

Sé que tengo una mente maravillosa, sé que podría hacer algo magnífico para el mundo. Algo por lo que se me recordará por los siglos. Sólo si el mundo hiciera algo por mí, daría lo mejor de mí, para este mundo.

Pero como el mundo no hace nada yo no hago nada. Quien en mí siembra , en mí recoge, en quién mí envenena, en mí muere.

Carta al padre que nunca tuve y al abuelo que se fue

Hola, sé que es tarde…

Después de todo lo que vivimos lo único que se me ocurre es escribir.

Me encantaría, el poder vernos y hablar de esa charla siempre pendiente, de ese tema que nunca abordamos, pero que los dos sabemos. Algún día, cuando coincidamos, espero tener esa conversación contigo. También me gustaría que supieras todo lo que me enseñaste, que por cierto, se te olvidó decirme que era mucho más importante que cualquier enseñanza académica.

Si fuera posible me gustaría pedirte perdón, a causa de que mis últimas palabras contigo fueron desagradables y me quedé con esa angustia de que ''esas'' fueran mis últimas palabras para contigo. Te alegrará saber que aún tengo ese espíritu de auto-superación que me caracterizaba y que heredé de ti.
   
 Sabes que no creo en Dios, pero espero que estés en algún sitio mejor que este. Eras muchas cosas, pero sobre todo, eras todo corazón. Si es verdad que hay un lugar después de la muerte,espera paciente, que algún día cuando me falten las fuerzas te buscaré allá dónde quiera que estés. Y tendremos esa conversación que nunca tuvimos, ya que te tuviste que ir, siendo yo un niño.

El Corazón y la Razón

Mientras mi raciocinio dicta lo que cree ''correcto'' ,el corazón me dice lo que siento. Lo que me hace dudar, ¿qué hacer? Es la primera pregunta que me cuestiono y la cual me lleva al sentimiento ''sentido''.

En primer lugar la razón dice, que todo acto moral que me implique, que tuviera que violar un principio, sera considerado un acto de deslealtad hacia mí mismo, pero, ¿qué pasa cuándo dicho acto implica la felicidad? ¿Es ''ser'' desleal con uno mismo dicho acto? Y lo más importante,¿dónde está el punto medio entre lo razonable y lo sentimental? Y, como dice Maquivelo, ¿el fin justifica los medios?

Después , el corazón, por otra parte nunca distingue el bien del mal, sino que siente o bien agrado, o bien angustia. En cualquier caso ''nunca sabe'' ¿por qué?, pero está ahí en medio de un campo de batalla, malherido, en mitad de un conflicto que no eligió, que nunca entendió. Maltrecho y casi maldito peleando hasta su último aliento, cara a cara contra la moralidad y la razón, dos contra uno pero él no siente miedo, no siente el dolor. Solamente la esperanza de que una vez termine la lucha,pueda encontrar un poco de paz. Y sin embargo él no lo sabe pero nunca lo dejarán tranquilo. Siempre hay una lucha, siempre hay una pelea. En cambio, como en un combate de boxeo, cuando suena la campana entre un asalto y otro, ese descanso es suficiente para seguir adelante.